Benito Pérez Galdós – LO PROHIBIDO

Narrada en primera persona por su protagonista, José María Bueno de Guzmán -un solterón despilfarrador y falto de escrúpulos-, la historia se desenvuelve en torno a las relaciones amorosas que éste, a lo largo de cuatro años, mantiene en Madrid con sus tres primas casadas y su progresivo deterioro físico y moral. Los diversos avatares por los que transcurre la trama novelesca sirven una vez más a Galdós para poner en pie una asombrosa galería de personajes que retratan con crudeza el clima moral y político reinante en la España la Restauración, gobernado por la especulación, la apariencia y el gasto.

Escribe Clarín: Para Galdós nada sería más fácil que escribir libros de recreo universal, con escenas dramáticas a porrillo, con chistes y gracias a borbotones... Pero eso ya lo ha hecho muchas veces... Ahora quiere otra cosa. Ahora penetra en el alma verdaderamente humana, y estudia y pinta la sociedad española por dentro, por primera vez, sí, por primera vez. ¿Y cómo hace esto? En una serie de novelas, como Balzac lo hizo, respecto de Francia en La Comedia Humana; como lo está haciendo también el autor de Germinal.
El que no comience por fijarse en esto, no puede juzgar Lo Prohibido, ni las novelas anteriores: El Doctor Centeno, Tormento, La de Bringas, etc.
El trabajo de Galdós es un estudio de caracteres, motivo por el cual la crítica comúnmente suele emparentarlo con Zola. Vemos temas como el adulterio, la maledicencia, la mezquindad y la doble moralidad. Vemos también el trabajo de un atento observador que, sin pretender establecer un juicio categórico, consigue pintar un fresco de los seres de su tiempo. Pérez Galdós atrapa en literatura su múltiple circunstancia.